Descripción
Los factores externos, hábitos de vida y el paso del tiempo son la causa del desequilibrio en nuestro sistema defensivo. Los cambios de temperatura, resfriados, gripe, un sistema inmune débil junto con el esfuerzo intelectual y algunas enfermedades como la psoriasis, rosácea, dermatitis, acné, atopia o vitíligo hacen que necesitemos potenciar las defensas y frenar el paso del tiempo. La protección y la prevención es crucial para mantener un buen estado de salud. -El mantenimiento de la higiene básica de las manos. -Proteger las vías respiratorias. -Reducir la exposición y evitar el contacto. -Reforzar con complementos nutricionales para fortalecer nuestro organismo. -Higiene